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El salario en el gobierno de Milei
Por Pablo Ferrari – Economista
La campaña electoral de Milei en 2023 se centró en el combate a la inflación. El mensaje subyacente era que se quería recuperar el poder adquisitivo del salario. Dos días después de que asumiera la presidencia, el ministro de Economía, Luis Caputo, afirmó que existía una “distorsión” y “represión” de los precios, es decir, que éstos estaban más bajos de lo que correspondía debido a las políticas de la gestión anterior.
En particular, se refirió a los precios relativos, los cuales son fundamentales para la economía porque afectan a todos los demás precios. Los más relevantes son los del dólar, la energía y el salario.
Economía política de precios relativos
El 12 de diciembre de 2023, el gobierno nacional dispuso un incremento del tipo de cambio o precio del dólar de casi 120%. Además dolarizaron tarifas, como las de luz y gas, y combustibles que se producen localmente, e igualmente aprobaron subas de sus precios. Simultáneamente, se redujeron los subsidios de las tarifas y transporte. Esta parte del presupuesto del Estado funciona como salario indirecto ya que de no existir el subsidio, el costo debe pagarse con dinero proveniente del salario.
El presupuesto vigente, es decir, el dinero disponible para su ejecución, es el mismo que el de 2023, pero como los precios son superiores, el presupuesto real es significativamente menor. Como las erogaciones del Estado para todo concepto superan a los ingresos, existe un déficit fiscal, y para terminar con el déficit no se pretende aumentar los impuestos a quienes más ganan sino reducir el “gasto” en educación, salud, infraestructura e inversiones que son claves para los ciudadanos, es decir, el salario indirecto.
¿Qué pasa con el salario? De manera opuesta al mensaje central subyacente en la campaña electoral de La Libertad Avanza, el precio del trabajo -el salario- es el que no solo no estaría reprimido sino muy elevado, el gran factor distorsivo, de acuerdo al sentido y a las consecuencias de las políticas económicas implementadas.
La “corrección” del valor del dólar se trasladó en gran medida a los precios y así también “corrigió” el precio real del trabajo: entre noviembre de 2023 y mayo de 2024, el salario real promedio se redujo 12,4%.
Evolución de salarios reales (nov 23-may 24):

El pasado 25 de julio, el Indec dio a conocer información referida a salarios de mayo que suscitó diversas interpretaciones.
- En promedio, de enero a mayo, el salario ganó un 4,6%.
- En promedio, de diciembre a mayo, el salario ganó un 1%.
- En promedio, de noviembre a mayo, el salario perdió un 12,4%.
El gobierno libertario asumió en diciembre, su devaluación tuvo un pasaje a precios y la inflación de ese mes fue de 25,5%: derrumbó el salario. La base correcta para medir la evolución del salario en “la era Milei” es noviembre, ni diciembre ni enero. Noviembre es el mes inmediatamente anterior a su asunción y, por lo tanto, representa sus condiciones iniciales.
Consecuencias de la reducción del salario
Analizando los últimos números disponibles al momento de la publicación del presente artículo, se pueden examinar más datos sobre el gobierno.
El coeficiente de Gini es una medida de la desigualdad representada por un número entre 0 y 1, donde 0 se corresponde con la perfecta igualdad y 1 se corresponde con la perfecta desigualdad. Dicho coeficiente del ingreso per cápita familiar de las personas pasó de 0,413 en el último trimestre de 2023 a 0,446 en el primer trimestre de 2024. Teniendo en cuenta que la medición oscila entre 0 y 1, se trata de un cambio relevante en la distribución del ingreso. Para aportar otros datos que confirman esta tendencia, de acuerdo al Observatorio de la UCA, la pobreza alcanzó al 54,9% de la sociedad y la indigencia el 20,3%.
Comportamiento del EMAE en porcentaje, (nov 23-abr 24).

En el período comprendido de diciembre de 2023 a mayo de 2024, la actividad económica evaluada por el Estimador Mensual de la Actividad Económica (EMAE) del INDEC se contrajo en promedio un 2,84% por mes. Dicha disminución del poder adquisitivo de salarios y jubilaciones, provocó una caída en las ventas y en la producción. La utilización de la capacidad instalada de las empresas pasó de 66,4% en noviembre de 2023 a 56,8% en mayo de 2024. Como consecuencia de esta merma, disminuyen las inversiones y, por lo tanto, la demanda de maquinaria y personal, contrayendo aún más la actividad.
La caída en las ventas y el aumento del costo de insumos y energía impacta en el cierre de comercios y empresas. Consecuentemente, esto impacta en el nivel de empleo, donde la tasa de desempleo en el primer trimestre de 2024 pasó del 6,9% al 7,7% en términos interanuales.
Como se advierte en los datos expuestos en este documento, la política aplicada provoca el cierre de comercios e industrias, desindustrialización, desempleo, baja de salarios y contracción del mercado interno.
